Este tulipán que floreció en primavera ya no existe. Hoy es apenas un bulbo atrapado en la oscuridad de la tierra de una maceta que guardo, con esperanza, en un lugar de mi casa...
Las fotos que elegí en los posts del 2008, por algún misterio de blogger que no comprendo, ya no están...
La lapicera negra con sus iniciales (nuestras también) grabadas que le regalé apenas lo acompañó un año...
El pequeñito, rojo y fálico regalo de San Valentín ayer quedó extraviado en una cama húmeda y tibia...
20 de febrero de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)