29 de marzo de 2008

Pensamiento(s)

El agua de la ducha cae sobre mi cuerpo, penetra mi cabeza, moja mis ideas. Mientras lavo furiosamente la bombacha roja, no pienso en toda la espuma que está haciendo. Es casi un acto reflejo. Una idea: la compulsión de buscar todo el tiempo. Otra idea: la necesidad de encontrar. Me quedo con esta tercera: necesidad del otro versus necesidad de estar solo. Y la ducha se convierte en el antónimo de mi búsqueda, es mi espacio, soy yo conmigo misma. Un espacio donde solamente me comunico conmigo en un mundo donde todo el tiempo estamos comunicados y todo comunica. De ahí a pensar en mi blog, en este espacio, apenas fue un salto. ¿En qué momento enjuagué la tanga y la colgué por ahí? Cambio necesidad por un momento y pienso en otra cosa. En la necesidad (mía y nuestra) de ser leídos, mirados, entendidos, denotados, validados, parafraseados, estudiados… por el otro. Por los otros. Y vuelvo a mi momento de la ducha, cuando estoy segura de estar sola conmigo.

19 de marzo de 2008

Adiós verano


Este verano no fue fácil. Mis amores me tuvieron muy ocupada, yendo y viniendo, entrando y saliendo. Nuevamente disculpas por el abandono. Por un momento pensé que no iba a volver.
Aún así, amo el verano. Aunque me tenga que bañar 3 veces por día (o más, en algunas circunstancias). Adiós amigo, nos vemos en 9 meses...